"La gloria o la fama no nos aliviará del espantoso vacío de la vida si no hemos templado el alma en el propio dolor y hecho nuestra la aventura del redimirnos, sin rebajarnos ante el poderoso para ganar su confianza, cuya ganancia no es otra que la deshonra.
Sólo así podrá el hombre grande aspirar a morir con la conciencia tranquila, sin remordimiento."