jueves, 29 de diciembre de 2016

El quebranto de la realidad

La realidad ofrece siempre apariencias muy diversas, que son máscaras o disfraces, a veces tan novedosos y seductores que nos distraen del excitante empeño de descubrir su verdadero rostro. Ese que oculta y que despierta en nosotros el desprecio y la decisión de quebrantarla, para preservar la pureza y fuerza de nuestras más caras ilusiones.

Sin verter lágrimas, roguemos porque esa libertad que el hombre ha elegido hoy sabiamente como el gran principio que dirige su destino redima a los humillados, y acabe con esa infernal contradicción, la de ser ella misma, la libertad, la que los injuria y esclaviza en el escenario de su infortunio.


sábado, 17 de diciembre de 2016

La presencia de Dios

La muerte nos acerca a Dios para engañarnos. Nos hace creer que Él todavía tiene poder sobre el destino y le rezamos para que nos libre de ella, pero la Muerte no obedece a Dios sino a sí misma y en medio de nuestro rezo nos quita la vida.

¿El hombre es una creación de Dios o el artífice que lo concibió?

Renunciar a Dios no es posible. Él siempre estará con nosotros aunque no exista, aunque sea el sueño que el hombre ha elegido para salvarse de la nada.


martes, 6 de diciembre de 2016

Un latido interior

Algunas veces el escritor, en el ejercicio de su arte se despierta y se ve solo y descubre que su verdadera misión en el mundo no es la de un filisteo, pues ha escuchado ese misterioso latido interior que conmueve su alma, que le revela en medio de su estupor que su obra no será vana, porque él ha dado testimonio del hombre.

La inspiración es obra del constante, reiterado y fatigoso ejercicio de la imaginación.

No obedece a un rapto de lucidez sino a ese esfuerzo continuo que triunfa sobre nuestro desaliento.