Las catástrofes llegan como agentes de una anarquía universal y lo transtornan todo. Es la amada naturaleza que se rebela contra el hombre inaugurando un reino de espanto que se creía olvidado.
Los grandes cataclismos, los terremotos, los ciclones, la erupción de los volcanes, las terribles tempestades que nos asolan, de pronto son las fuerzas desatadas de la naturaleza que sigue siendo aún nuestro amo y que por un momento vuelve a tomarnos torvamente de la mano.